Story 01
Esta es la esencia de la estética minimalista: la adición a través de la sustracción. El jardín zen, también conocido como jardín de roca japonés o jardín seco, adopta los principios del esteticismo japonés. El estilo Karesansui, por ejemplo, usa solo rocas y arena. Se crean patrones en la arena para representar ondas y olas. Estas surgen de la creencia de que la esencia del agua puede ser expresada más vivamente a través de su ausencia. Con estrecha relación con el budismo zen, muchos de los famosos jardines de roca japoneses pueden encontrarse en templos. En tal sosegado ambiente, la naturaleza es simple y la belleza eterna.
scrollEl jardín zen se asocia a menudo con un término japonés difícil de traducir, wabi-sabi, que alude a la belleza de la imperfección. Wabi-sabi celebra lo imperfecto, lo transitorio, lo rústico y lo melancólico. En el caso del jardín zen, este nos recuerda que la belleza se encuentra en la ausencia de materiales, más que en su abundancia; en estados transitorios, más que en los permanentes. Para muchos, sin embargo, wabi-sabi no es meramente un código estético; es una representación filosófica de la vida misma.
Las ondas del jardín zen inspiradas en el agua realzan la tranquila superficie de la esfera de Seiko Presage—disponible en armonioso blanco y en apacible negro. Simple a la vez que sublime, estas esferas crean un elegante recordatorio de que menos, es más. Y que la verdadera belleza es eterna.